Aspiración de polvo de aluminio con supresor de chispas

Las carrocerías de los vehículos modernos ya no están hechas completamente de acero, sino que se trata más bien de una construcción híbrida: una mezcla de acero, aluminio, magnesio y plástico permite un peso reducido y una alta funcionalidad.

Esta tendencia también repercute en la reparación de carrocerías en los talleres autorizados. Esto se debe a que el polvo de metales ligeros es inflamable y si, por ejemplo, un mecánico de automóviles que está puliendo una pieza de aluminio de la carrocería golpea accidentalmente una pieza de chapa adyacente, se generan chispas que pueden prender fuego al polvo.

Para esta tarea y para el cliente BMW, Ruwac ha desarrollado un aspirador compacto que prescinde de la separación húmeda habitual (en la que el material aspirado pasa a través de un líquido y, por lo tanto, se vuelve «inofensivo»). En cambio, en un recipiente compacto montado en el aspirador hay un «supresor de chispas», que funciona según un principio puramente mecánico y que, en sentido figurado, «destruye» cualquier chispa. A esto le sigue una sección de estabilización de 5 m, antes de que el material aspirado entre en el recipiente colector. Exhaustivas pruebas realizadas en Ruwac y en el centro de desarrollo de BMW han demostrado que el supresor de chispas evita de manera efectiva y fiable la aspiración de fuentes de ignición que representan un riesgo real.

Con su diseño compacto, los aspiradores Ruwac con supresor de chispas son ideales para usarlos en talleres, especialmente porque no solo son adecuados para aspirar directamente en la máquina, sino también para aspirar polvo. En este caso, el aspirador funciona sin supresor de chispas; las conexiones de extracción y aspiración están diseñadas para evitar confusiones.